Un madurador de carne se utiliza principalmente en la industria de la restauración, trabaja para hacer que las piezas de carne sean más jugosas mientras conservan la intensidad de su sabor. Hay varias etapas en la maduración de la carne. El primer paso es colocar las piezas nuevas en estos dispositivos para que estén expuestos a un ambiente constante de temperatura, humedad y flujo de aire. Por un lado, la humedad que pueda tener la pieza se evapora, intensificando el sabor al concentrarlo mucho más. En ese punto, las enzimas naturales de la carne son las que suavizan el tejido y dan como resultado una carne mucho más sabrosa y tierna al hacer que el tejido se vuelva más flexible. Una vez que se ha eliminado esa capa, eventualmente se formará una capa dura en el exterior del lomo, momento en el cual la señal indicará que la pieza está lista para ser consumida. Una cantidad muy pequeña del peso y volumen de la carne se pierde durante el proceso de maduración, lo que da como resultado un producto tierno por dentro y con un sabor maravilloso. Con el uso de maduradores de carne, es posible conservar las piezas de carne durante más tiempo mientras maduran, mejorando su apariencia y haciéndolas más fáciles de digerir. Todo esto se puede hacer en un ambiente controlado donde no proliferarán hongos ni bacterias.

Por ejemplo, los expositores de carne madurada que ofrece ISOTERMIA, son ideales para hacer el proceso Dry Aging de forma fácil y con total seguridad. Existentes en diferentes acabados exteriores: inoxidable AISI 304 (Modelos MDA) y  Acero Lacado Negro (Modelos MDAB)