La tecnología ha sufridos una gran evolución en las últimas décadas. Esto nos ofrece muchas soluciones realmente creativas, como utilizar dióxido de carbono (CO2) y otros refrigerantes para controlar la temperatura de los espacios. El evaporador es el dispositivo encargado de utilizar estas sustancias para transferir la energía térmica de un espacio. A continuación, le enseñamos sobre cómo funcionan los evaporadores y los distintos tipos disponibles.
El dispositivo encargado de transferir calor entre fluidos refrigerantes se conoce como evaporador. La energía térmica se transfiere durante este intercambio de calor dentro del evaporador. Dado que durante este proceso siempre se transfiere calor de un material a una temperatura más alta a un material a una temperatura más baja, el fluido refrigerante recibe esta energía térmica.
Actualmente, el evaporador desempeña un papel importante en una amplia gama de industrias, incluidos los sectores químico y médico. Vienen en forma de aires acondicionados, sistemas de calefacción central y habitaciones frías. El principio de entalpía sirve como base del funcionamiento de los evaporadores. Esta teoría explica cómo el calor pasa de un cuerpo con mayor temperatura a otro con menor. El refrigerante sería objeto de la citada energía térmica en la situación que nos interesa. Una vez recibido, el refrigerante se vaporiza, convirtiéndolo de líquido a gas. La energía térmica eventualmente comenzará a ser liberada lentamente por el líquido refrigerante dentro del evaporador, permitiéndole alcanzar gradualmente su temperatura normal. Los evaporadores funcionan de manera similar.
Estos son los diferentes tipos de evaporadores
Sabiendo ya cómo funcionan los evaporadores, es hora de conocer los diferentes tipos que están disponibles. Basándose en el tipo de construcción del evaporador y la alimentación de refrigerante, existen dos tipos diferentes de divisiones de evaporador.
Evaporadores con alimentación de refrigerante
Alto: Sin duda, el estilo de evaporador más popular disponible actualmente. El funcionamiento de este tipo particular de evaporador se basa en que el refrigerante se evapora dentro del circuito del evaporador, quedando únicamente el vapor con la energía térmica que ha absorbido.
Inundado: este tipo de evaporador utiliza refrigerante líquido. Una vez que se ha absorbido la energía térmica, el refrigerante dentro del evaporador se evapora y es recogido por el colector de vapor.
Sobrealimentado: En este tipo de evaporador, la circulación del refrigerante se gestiona controlando el flujo a través de una válvula fija, que a su vez abre una bomba. Como puedes imaginar, el nombre hace referencia a un exceso de líquido que se separa del vapor y luego se hace circular nuevamente.
Dependiendo de cómo fueron construidos
Los dos materiales que se pueden utilizar para fabricar este tipo de evaporadores son el acero y el cobre. Las tuberías para evaporadores grandes o cuando el refrigerante utilizado para operar el evaporador es amoníaco están hechas de acero. Si no se da ninguno de estos dos escenarios, el cobre desbanca a otros materiales como la más utilizada sustancia.
El hecho de que este tipo de evaporador esté formado por dos placas metálicas soldadas herméticamente es lo que lo hace único. El refrigerante fluye precisamente en la zona entre las dos placas metálicas. La posibilidad de utilizar varios de estos evaporadores juntos mejora su uso.
Los evaporadores más recientes tienen aletas. Su construcción se basa en serpentines en forma de tubos, que contienen placas metálicas a través de las cuales se produce la transferencia de calor.
Si desea contar con ISOTERMIA para elegir su evaporador para refrigeración comercial debe saber que todos nuestros evaporadores tienen los mejores diseños del mercado porque son sencillos de usar, intuitivos y duraderos. Además de contar, como no, con la mejor calidad y rendimiento posible.